miércoles, 21 de marzo de 2012

LAS ALERGIAS
Con la llegada de la primavera se aprecian más los síntomas de las alergias. Cada vez hay más personas (el 15% de la población) que la padecen y a edades más tempranas.
La alergia es una respuesta exagerada   de nuestro organismo cuando entra en contacto con determinadas sustancias provenientes del exterior. Las sustancias capaces de provocar una reacción alérgica se conocen como sustancias alergénicas, alérgenos.
Los posibles alérgenos son muy numerosos y pueden ponerse en contacto con nosotros a través de diversos medios:
-El aire que respiramos: pólenes de plantas, polvo de la casa, hongos, pelos de los animales…
-Medicamentos: penicilina, aspirina…
-Picaduras de insectos, mordeduras,…
-Contacto con la piel: cosméticos, productos industriales…
La persona alérgica a una sustancia desencadenará una respuesta exagerada cada vez que entre en contacto con ella.
La causa de una alergia no debe atribuirse a una sustancia en concreto, sino al individuo, que está predispuesto genéticamente a desarrollar una respuesta exagerada tras el contacto repetido con las materias potencialmente capaces de inducir a una reacción defensiva en el organismo.
La mayoría de las reacciones alérgicas tienen escasa importancia y no ocasionan grandes molestias. Sin embargo, en ocasiones pueden ser extraordinariamente graves y precisar de intervención médica urgente.
Además de prevenirlas existen otras formas muy eficaces para reducir las molestias .Dentro de los tratamientos podemos diferenciar dos tipos:
.Medicamentos: no curan la alergia pero sí ejercen un alivio sintomático. Son diversos, en función de la acción que hacen sobre el organismo(corticoides, antihistamínicos, teofilinas, cremonas, broncodilatadores,.) En general se recetan para los síntomas del asma, la rinitis y la conjuntivitis.
.Inmunoterapia: este tipo de terapias es el único tratamiento que puede alterar el curso natural de la patología alérgica y prevenir el desarrollo de asma, además de ser bien tolerada por el alérgico. Se trata de administrar dosis de alérgeno en repetidas ocasiones, lo que comúnmente se conoce como vacuna antialérgica .De esta manera,  el cuerpo se acostumbra progresivamente al agente causante de la alergia, hasta que deja de reaccionar de forma exagerada. Con este tratamiento se mejora la calidad de vida y en pacientes con rinitis alérgica, la inmunoterapia puede prevenir el desarrollo del asma.

 


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