sábado, 10 de marzo de 2012

¿CUÁNDO EMPIEZA EL FRACASO ESCOLAR?      



En nuestro país uno de cuatro niños fracasa en sus estudios, con los consiguientes problemas que ello acarrea, incluido los psíquicos.
Esto unido al elevado nivel de absentismo escolar y de abandono muestran la existencia de un alto grado de fracaso escolar, que requiere una solución, y no sirve decir que los alumnos son “vagos” o “tontos”. Por lo tanto existen factores sociales, educativos y culturales y no solo individuales que desencadenan este hecho.
No podemos decir que el fracaso escolar sea porque el niño no es inteligente, o porque el niño tiene problemas orgánicos, sin saberlo, simplemente porque con estas respuestas quede nuestra conciencia más tranquila, o simplemente como muchas veces se dice “es que al niño no le gusta estudiar”.
El fracaso escolar la mayoría de las veces está ocasionado por una mala educación  desde pequeño, bien por comodidad de los padres, por sobreprotección, por abandono
Desde que el niño es pequeño hay que ir inculcándole unos principios básicos de comportamiento, no atemorizando al pequeño cuando algo no le sale bien, ¡nadie nace sabiendo!
Hay que estimular el gusto por el estudio, y el rendimiento académico es el interés que demuestren los padres por esas actividades y en especial, el reconocimiento de logros y éxitos de sus hijos en el área. ¡Pero ¡cuidado! Este debe ser medio, porque si se exagera lleva al niño a vivir un estado de tensión y emergencia muy negativo. Es decir, si los padres aparecen excesivamente impacientes o preocupados, el niño no va a gozar del trabajo escolar y se corre el riesgo de que se transforme en un tormento para el niño.
El mecanismo que influye indirectamente en un niño es la adquisición de valores, sobre todo por vía de la imitación, en especial de los adultos, por tanto para prevenir problemas de escolaridad es indispensable que el niño adquiera desde pequeño los valores del esfuerzo, de la responsabilidad y del conocimiento.
El niño debe tomar conciencia de sus propios recursos, debe trabajar solo y la persona que le va ayudar no debe estar en la misma sala. Es bueno que desde pequeño trate de resolver por sí mismo sus dificultades, y comprobar que él es capaz de hacerlo solo con un poco de esfuerzo. De esta forma el niño se sentirá bien y satisfecho. Por su parte los padres y profesores nunca deben mostrar impaciencia ante las torpezas, las dificultades de comprensión y errores cometidos por el niño, ya que muchas veces  les ayudan o  les hacen tareas porque esta postura es más cómoda para ellos, evitando que el niño desarrolle sus recursos y potencialidades y por otro lado el niño desarrolla una idea de sí mismo de incapacidad con el consiguiente desapego, si no desagrado, en todo lo que se refiere a actividad intelectual.

De todo esto sacamos unas CONCLUSIONES:
El niño debe sentir que sus padres  están ahí para ayudarle cuando lo necesite, pero mientras él, es el que debe solucionar sus actividades escolares.
Los padres por su parte no deben manifestar desagrado ante las dificultades del niño, que en muchos casos se convierten en regaños y descalificación que implica por parte del niño una inseguridad en sí mismo, produciendo un atasco en la respectiva dificultad, produciendo un circulo vicioso entre los errores del niño y la destemplanza del adulto, interacción que muy frecuentemente se desarrolla en espiral.
Es muy importante que cuando un niño ha realizado un trabajo y luego su resultado no es bueno o el esperado, no hay que reñirle sino todo lo contrario animarle, “la próxima vez será”.
También hay que tener en cuenta que hay situaciones que pasan inadvertidas por parte de los padres y profesores, pero que tienen gran repercusión en el niño, como son la discriminación del niño frente a sus hermanos o niños de la misma edad o de la misma clase, que hacen que el niño pierda seguridad en sí mismo.

Fuentes de la información e imágenes:

4 comentarios:

  1. Gran acierto Juanma, estoy muy de acuerdo con todo lo que pones en tu post, ya que es cierto que la mayoría de las veces se podría solucionar si los padres tuvieran conciencia de lo que deberían hacer con sus hijos. Un saludo. =D

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  2. Estoy de acuerdo con vosotros pero también pienso que habrán niños que aunque los padres se vuelquen totalmente con ellos y los convenciesen no quieran o no sirvan, saludos

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  3. Chicos, yo no pienso como ustedes ya que primero unos padres quieren lo mejor para sus hijos y hacen lo necesario e innecesario para que estos salgan adelante, a parte también pienso que no siempre es el problema de los padres, sino que en muchos casos el problema es de los profesares ya que te desaniman de una manera que se te quitan las ganas de estudiar. Yo he vivido un caso cercano de fracaso escolar y sé de que hablo. Un saludo!! :)

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  4. Cada uno tiene su opinión sobre el tema estoy tanto de acuerdo como con Pedro con Pilar. Saludos

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